El individuo autosuplantado parte dos, también conocido como Doug Stamper

       Pero, qué sucede, si la suplantación la realiza un ciudadano sobre su propia persona. 

     El ordenamiento jurídico al respecto no recoge ninguna norma punitiva a este comportamiento.            Supongamos que un individuo de 56 años de sexo masculino, de mediana estatura, de pelo castaño y entrecanoso, del pelo que le queda, para entendernos, de origen peninsular, aclaro, de la península ibérica, casado en primeras nupcias con,....  con hijos o sin ellos, con un nivel cultural entre bajo y medio, no me refiero a su nivel de estudios, este "baby boomer" es probable que tenga cierto nivel de estudios y haya desempeñado trabajos burocráticos sin gran trascendencia ni enjundia.

    No se asusten, no es más que un pedacito de la entrada anterior.

    Lo pongo para que hagáis un poco de memoria. 

    Antes de entrar en materia, espero que hayáis tenido unas "formidables" fiestas, si no ha sido posible, podéis echarle la culpa al gobierno, a las vacunas, al pasaporte covid, a los cuñados, o al maldito exceso de comida y bebida. Personalmente mis formidables fiestas han sido “ni fu ni fa” tirando a glotonas, por lo que aprovecho el efecto "bajativo y laxante" del personaje "doug stampador” para deshacerme de los excesos festivos que transitaban por mis entresijos. 

    Pero volvamos a nuestro individuo auto suplantado. Desconozco la auténtica biografía de nuestro "self impersonated individual", pero él mismo nos proporciona su propia descripción en Twitter. 

     Doug Stamper - Michael Kelly nos ofrece algunas de estas imágenes en el buscador de Google.

 Pienso que nuestro Doug Estampador se debe de identificar sobre todo con esta primera imagen, en la que se lee: 

“sometimes for my job, I have to put fear in other people”. 

  

 Un tío duro, gafotas pero duro, encorbatado, camisa blanca y trabajador incansable en el ordenador.

Aunque cuando se relaja y deja de meter miedo, se cambia de montura de gafas y se calza una cazadora. Por desgracia en la primera imagen, aparece la bandera de los USA, por lo que nuestro buen patriota no ha podido usarla. 

Sin embargo nuestro Douglas Estampador, ha escogido esta otra imagen.

 El personaje habla a través del móvil, parece dar algún tipo de instrucción, como:

 “acabo de salir del baño, y no había papel, quiero que vengas a poner un nuevo rulo de papel higiénico, ya”. 

Obviamente, el baño es la puerta de color marrón con una placa también de color marrón, en la que se puede leer “ Bathroom”. 

     No parece que tenga suficiente fuerza la imagen del duro y encorbatado Doug en la foto original (por cierto, la corbata además de parecer barata es fea de cojones), y se ha permitido dos licencias artísticas, acercar la imagen y oscurecerla (para que no se le vean sus arrugas) y lo que más me gusta, el halo azulado amarilleante que parece salir de su despejada frente y que en la foto de su biografía en Twitter parece una centelleante bola de árbol de navidad en la que dos dragones se comen el rabo el uno al otro (bueno, eso es lo que parece)

    Realmente, nuestro ESTAMPADOR, tiene ciertas tendencias artísticas, que no debería desaprovechar y en lugar de decir tantas vulgaridades y lugares comunes en su cuenta de Twitter, podría dedicarse al tratamiento artístico fotográfico de fotos que no le pertenecen con herramientas que tampoco le pertenecen. 

     Creo que voy a tener que dejar para otro día la revisión erótico festiva de la biografía de nuestro héroe generalísimo, sedimentoso, fresno, deficiente y que quiere quedar contigo en los servicios. Realmente es que se me ocurren cantidad de pelotudeces cada vez que veo los dragones comiéndose los rabos. Próximamente en éste, su blog. 

Aclaraciones: 

En la biografía de nuestro ESTAMPADOR aparecerán en algún momento, la denominación de un partido político español y la bandera española. Esta entrada, la que la precede y las que se me ocurran publicar, nada tienen que ver con ese partido político ni con nuestra bandera nacional. El destinatario del despiporre es solo él, el despiporrador autosuplantado, seguramente por cobardía y por feo. Nos vemos en la siguiente entrada, hay material para que el descojone esté asegurado.